Dec 21, 2009

kurazaybopipo



Se puede hablar del imperio en la forma más tradicional que es verlo como manera de gobierno. De aquí podemos estirar la definición para hablar de "imperio" como sinónimo de liderazgo, ya sea a la buena (un imperio impuesto, como el caso del fallido virreinato) o un imperio con cierto mérito en algún ámbito, como pudiera ser el ya decadente imperio del dólar o el de la selección brasileña en la copa del mundo (este dato no me lo crean, no sé nada de futbol y lo consulte en la wikipedia). Por ahí entra la connotación negativa que se le dió a la palabra "imperialismo" y que siempre me ha hecho mucha gracia pues me imagino a personajes emperifollados dando órdenes desde su trono, cetro en mano.

Aquí hagamos un interludio para mencionar que a mi la figura del emperador siempre me ha resultado intrigante, ya sea chino, azteca o hawaiiano. Creo que el poder siempre está rodeado por un aura de misterio y magia, para bien o para mal. No lo sé describir exactamente pero creo que el hecho de que alguien haga respetar su voluntad por un grupo extenso de personas tiene algo de sin sentido. Imagino que más o menos por ese lado es que la Rowling usó la palabra "Imperius" en la saga Harry Potter para el hechizo que permite a un mago obtener el control total de otra persona. Ése es el uso de "imperio" que me interesa.

Verán, siempre me ha sorprendido ver la manera en que alguien le es incondicional a otro alguien. Lo veo todos los días, desde la obediencia dogmática de los niños pequeños a sus padres, que aunque digan que muy gerrosos e ingobernables siempre los logran poner en su lugar, pasando por los fanatismos religiosos y hasta casos que me resultan aún más absurdos, como el de personas totalmente rebeldes que yo consideraba que eran, además de todo, independientes, que se dejan manipular en algún sentido por alguien más.

Aquí muchas veces está involucrado el "amor" y muchas veces mezclado o confundido con el temor, ya sea a la pareja, ya sea hacia los padres, pero en general hacia alguien que serían capaces de reconocer como una autoridad. Lo que me llama la atención es que en estas situaciones se entra en un juego enrevesado en cuestiones de responsabilidad. Se supone, al menos en mi rincón del universo, que la autoridad gana ese lugar porque quienes la siguen se convencen de que es bueno y correcto hacerle caso y regirse de esa manera, como pudiera ser el caso de los señalamientos viales que son estándares en todos los países de la ONU, mínimo trayendo la ventaja de que muchísima gente los reconocerá independientemente del idioma que hablen. Más o menos con el mismo razonamiento se adoptan "autoridades" en ciertas materias como el sistema métrico decimal (aunque a los gringos les sigan gustando más las docenas y octavos de pulgada) o los estándares de la web.

Pero ¿qué pasa cuando entra el factor del "miedo"? porque seamos sinceros, muchas veces se hace la voluntad de la pareja o de los padres únicamente por miedo a las consecuencias de actuar en contra, generalmente es miedo a algún tipo de castigo. Yo soy de la opinión de que, al igual que el hechizo imperio, este miedo libra de toda responsabilidad al que se maneja de esa manera. Quien está actuando dominado por el miedo no puede responder por sus actos, es igual que si te amenazaran de muerte. Puede decirse que esta manera de verlo es exagerar demasiado las cosas, pero déjenme terminar. No me refiero a que queden libres de sus responsabilidades sino más bien a que, de alguna forma, eso los descalifica automáticamente del nivel adulto al que pudieron haber aspirado a alcanzar.

De modo que si en algún momento te encuentras haciendo las cosas para que X persona no se vaya a enojar, aquí está mi consejo: crece un poquito.