Jan 16, 2010

#nudoenlagarganta



La tortura es la mejor manera de probar los límites humanos de resistencia. Hay máquinas especializadas para hacer sufrir, pero creo que ninguna es tan terrible ni tan efectiva para el propósito del inquisidor como el Waterboarding.

Consiste en poner sobre una tabla y atado obviamente al individuo mientras se le cubre la cara con una tela y se le vierte agua para asfixiarlo y meterle agua en los pulmones.

El waterboarding tiene muchas variaciones, como el colocarle una tela sobre la cara, mantenerle la boca abierta con un pedazo de metal e incluso taparle la cara con plástico.



Mi punto con esto es que hay otra variante que, según las personas que han sometido a este método de tortura, es el peor.

Se trata de meterle un pedazo de tela lo suficientemente largo en la garganta y echarle agua nuevamente, haciendo que trague y la tela se le meta hasta el estómago. Esto se logra echando agua poco a poco obligando a la persona a tragar el agua y después respirar, para luego meter el pedazo de tela o toalla y el instinto natural de tragar la mueve hacia el estómago.

La tela hace a la persona atragantarse y tratar de vomitar el objeto extraño, pero la tela es tan larga y gruesa que simplemente no lo logra. Así se queda insetrada en la boca, garganta y estómago. La sensación es, según relatan, como tener un nudo en la garganta.

Dejan de verterle agua para hacerle preguntas y si no consiguen lo que quieren escuchar jalan el pedazo de tela con tal fuerza que desgarran el interior de su estómago y garganta.

Gritos,

sangre

y se repite.