Feb 26, 2010

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Así como una vez dije que el alcohol era el lubricante social por excelencia, bien podría decir que el café también sirve como lubricante social... para las mujeres y los mariquitas.

Pero el objeto de estudio en este post no será ese, aunque sentía necesario mencionar lo anterior. Dejando atrás ese punto llegaron a mí las siguientes preguntas:

¿Por qué no tomo café en las mañanas? ¿Realmente es tan buen estimulante? ¿Por qué sabe tan culero?

La respuesta a la primera pregunta es porque no tengo ni la necesidad ni el hábito. Sí, todos los días me levanto temprano y a veces me meto unas buenas desveladas por andar fappeando con lolis. Y no es que en las mañanas me levante con bríos de bailar y repartir alegría como una puta ninfa, pero simplemente el sueño rara vez me gana.

Para contestar la segunda pregunta me he visto forzado a tomar café esta semana desde el martes en la mañana.

Día uno: Nada de "patadita" o levantón a las 6:50 am que me tomo el café. Odio los martes también, son los hermanos gemelos de los lunes con retraso mental.

7:15 am - comienzo a ver con horror cómo comienzo a mover uno de mis pies arriba y abajo con mucha ansiedad. Demasiada ansiedad... tenía una hueva tremenda de hacer cosas pero mi pie, al parecer, tenía unas ganas enormes de acabar rápido lo que fuera que estuviese haciendo para salir de ahí. ¿Existirá el término "pasivamente pro-activo"? ¿No? Bueno, pido la patente.

8:30 am - Comienza a darme mucha más hueva hueva de lo normal, se me antoja otro traguito de café pero ya no hay.

Y el resto del día pasan cosas muy shockeantes en la chamba que me distrajeron de mi experimento.

9:00 pm - Me sentí tentado a pensar que el experimento era una pérdida total de tiempo y estuve a punto de abandonarlo, pero en la visita al Oxxo vi una de esas latas de café frío y como Junkie decidí comprarla para beberla en la mañana siguiente.

Día dos: 6:56 am me levanté tarde como siempre y, pese a que algunos días se me olvidan hacer cosas, todo el ratito me acordé de llevarme la dichosa latita para probarla.

8:00 am - De nuevo con el jodido moviento del pie, pero ahora noto horrorizado que son los dos. Y básicamente pasa la misma rutina de una ligera elevación del estado de ánimo para acabar, de nuevo, hundido en la mierda emocional.

Día tres: Ahora me decidí tomar el café en la tarde, a la hora de la salida del trabajo, 4:00 pm.

5:00 pm - Acabo dormido.

8:00 pm - Me despierto y maldigo al jodido café por no mantenerme despierto.

Día cuatro: Saco mis propias conclusiones sobre los efectos del café y decido no tomarlo hoy.

Conclusiones: ¿Conocen el efecto placebo? Es precisamente lo que creo que me pasó los primeros dos días. Iba tan condicionado a que el café me iba poner activo y supuse por un corto periodo que así fue. No me explico porque el día tres no me mantuvo despierto lo suficient, la única conclusión de eso es que tal vez mi hueva necesita cantidades indutriales de cafeína para mantenerme despierto.

Me pareció también altamente estúpido tomar un "estimulante" para realizar un trabajo donde estás sentado 9 horas al día.

Ahora bien, sobre mi tercera y última pregunta sobre este tema en particular...

Si la gente necesita echarle azúcar a una bebida debe ser porque o está muy amarga como el agua de limón o porque sabe horriblemente como algunos tés e infusiones. El café tiene lo mejor de ambos mundos... sabe horriblemente amargo sin azúcar.

La naturaleza es muy sabia... si algo nos sabe horriblemente amargo es porque se supone que no debemos comerlo o tomarlo. Y sí, el café, en su estado natural, es veneno... BAM! Sus granos matan insectos y algunos animales para proteger la planta. De hecho, en grandes cantidades el café puede ser mortífero para los seres humanos. De hecho, ese efecto estimulante que muchos sienten es porque el cuerpo se esfuerza en deshacerse del veneno. Y eso es todo lo que tengo que decir respecto del café.